Entrevista a Toni Sarrión sobre Viticultura Biodiámica
Desde hace algunos años, Toni y el equipo de agricultura de Bodega Mustiguillo se embarcaron en este laborioso proyecto orientado a mejorar la vida de sus suelos y certificarse como elaboradores de vinos biodinámicos.
Toni: ¿Crees en la biodinámica?
Sí, estoy seguro que la biodinámica va a mejorar la calidad de nuestros campos de cultivo. Con este tipo de agricultura vamos a conseguir aumentar la biodiversidad en nuestras fincas, mejorar la calidad de nuestros suelos (dándoles más vida microbiana), lograr un equilibrio y un desarrollo del viñedo óptimo. Para que una agricultura sea sostenible, no solamente hay que respetarla y conservarla, sino también vivificarla, regenerarla y desarrollarla.
Como productor, ¿Qué implicaría trabajar de forma biodinámica y cómo afectaría al vino?
Como productor implica un cambio de conciencia de una agricultura ecológica con ciertos requisitos menos exigentes que los que puede conllevar estar en biodinámica. Además nos permite adquirir ciertas prácticas antiguas que se han dejado de hacer por falta de observación y que, desde nuestro punto de vista, es necesario recuperar para tener una finca equilibrada con el medio que le rodea, como son el mundo animal y el mundo de la astrología. En el vino, significaría una mayor expresión del terroir, pues tenemos viñedos con gran variedad de perfiles geológicos muy interesante. Al utilizar preparados biodinámicos como el 500 y María Thun, mejoramos la estructura y la vida útil del suelo.
Dirías que un vino biodinámico está más bueno o es mejor? ¿O simplemente un elemento de marketing para venderlo más caro?
No, desde el punto de vista organoléptico cada vino tiene sus características. Lo que sí que creo, es que un vino biodinámico es de mejor calidad desde el punto de vista nutritivo, simplemente porque es más natural al tener menos aditivos químicos. El hecho de introducirnos en biodinámica no ha sido una estrategia de marketing, pues un vino de nuestro segmento no se vende por la etiqueta que lleva o la certificación, sino por su calidad. Hay que tener en cuenta que introducirse en este tipo de agricultura supone también un coste económico más alto en el proceso de producción, y si no tienes filosofía de trabajo anterior es difícil asumirlo.
¿Hay un mercado que lo pida expresamente aquí en España?
De momento, nadie nos ha pedido que hagamos un vino biodinámico. Desde Bodega Mustiguillo intentamos vender un paisaje, una historia, una forma de trabajar y tenemos claro que queremos que la biodinámica forme parte de nuestro proyecto.